Investigadores desarrollan biopesticida sostenible contra plaga de frutas
Investigadores de la MSU lideran un proyecto para crear un biopesticida a base de levadura, buscando frenar la Drosophila suzukii, plaga destructiva de cultivos.
Un equipo de investigación liderado por la Universidad Estatal de Michigan (MSU) recibió una subvención de $325,000 del Departamento de Agricultura de Estados Unidos para crear un biopesticida basado en levadura. Este producto busca combatir la Drosophila suzukii, una plaga invasora que afecta gravemente cultivos de bayas y árboles frutales. La mosca, originaria de Asia oriental, fue detectada en Norteamérica en 2008 y desde entonces ha causado estragos en los cultivos debido a su capacidad para perforar frutas maduras y generar múltiples generaciones en un mismo ciclo agrícola.
La investigación, dirigida por Julianna Wilson, especialista en frutales de la MSU, y Molly Duman Scheel, experta en genética molecular de la Universidad de Indiana, aplica avances en biotecnología para diseñar un biopesticida que interfiera en la traducción proteínica del ARN de las plagas. Esta tecnología ya ha demostrado ser efectiva en el control de nematodos y mosquitos, y ahora se adapta para enfrentar a la Drosophila suzukii con una precisión única que minimiza el impacto en otros organismos.
El proyecto aprovechará las propiedades naturales de la levadura para atraer y eliminar la plaga. Según los investigadores, este enfoque ofrece una alternativa sostenible a los pesticidas tradicionales, garantizando la protección de cultivos sin dañar el medio ambiente. Además, se realizarán pruebas de laboratorio y de campo para evaluar la durabilidad del biopesticida y su impacto en otros insectos beneficiosos, como los parasitoides de la plaga.
La Drosophila suzukii representa un desafío importante para los agricultores debido a su capacidad para invadir cultivos de manera continua durante todo el año. El biopesticida propuesto podría revolucionar el manejo de esta plaga, especialmente en huertos y plantaciones vulnerables. Entre los objetivos del proyecto, se encuentra definir estrategias efectivas de aplicación y garantizar que los resultados beneficien a los productores de todo el mundo.
Con este desarrollo, los investigadores esperan ofrecer una herramienta innovadora que no solo protege los cultivos, sino que también fomenta un manejo agrícola más sostenible y adaptable a los desafíos actuales. Este avance subraya la importancia de la biotecnología en la protección de los sistemas alimentarios globales.