La revolución de la inteligencia artificial en la agricultura

En un mundo donde la tecnología configura la forma en que hacemos negocios, la agricultura ha encontrado en la inteligencia artificial (IA) su aliada más poderosa. Los avances en esta área están optimizando recursos, pronosticando condiciones climáticas, y manteniendo a raya las plagas y enfermedades, lo que está dando lugar a una revolución agrícola.

En este contexto, uno de los recursos críticos en la agricultura es el agua, y América Latina, a pesar de ser dueña de casi un tercio de los recursos hídricos del planeta, se enfrenta a crecientes niveles de estrés hídrico debido a la sequía, sobreexplotación de acuíferos y contaminación. 

Al respecto, Mario Bustamante, fundador y CEO de Instacrops, destaca que "la agricultura consume el 70% del agua dulce y al convertirse en un recurso escaso, el agricultor tiene que saber cómo y cuándo usarlo".

La IA, mediante el análisis en tiempo real de datos, proporciona a los agricultores información necesaria para tomar decisiones fundamentadas sobre la gestión de este recurso vital. 

Instacrops, una plataforma de AgTech, utiliza técnicas de IA y visión computacional para integrar diversas fuentes de datos sobre cultivos en una única plataforma. Esto permite ofrecer recomendaciones concretas a los agricultores para el uso eficiente del agua, nutrientes, fertilizantes y para evaluar la salud de las plantas. Además, alerta a los productores sobre enfermedades, hongos o plagas de manera temprana.

La accesibilidad es clave en este avance tecnológico. La plataforma se adquiere mediante suscripción, como los servicios de streaming, y se accede a través de una aplicación móvil, convirtiéndose en un asesor agrícola virtual de bolsillo. Instacrops ha conquistado los mercados de Chile, Colombia y México, este último enfrentando un alto estrés hídrico.

Sin embargo, los desafíos persisten. La falta de conectividad en algunas zonas rurales de América Latina obstaculiza el acceso a estas herramientas. Además, el poco financiamiento destinado para tecnología es un problema común, ya que no existen muchas opciones de apoyo financiero para los agricultores.

La IA está marcando un hito en la agricultura, aumentando la eficiencia, reduciendo costos y mitigando riesgos. Al mismo tiempo, está configurando un sistema agrícola más inteligente, sostenible y capaz de alimentar a una población mundial en crecimiento. 

Para aprovechar plenamente esta revolución, es esencial cerrar la brecha digital y encontrar soluciones de financiamiento para que todos los agricultores puedan cosechar los beneficios de la IA.