Empresas de aguacate enfrentan críticas por prácticas ambientales destructivas

La creciente demanda de aguacates en Estados Unidos está ejerciendo una presión alarmante sobre el medio ambiente en Michoacán, México. Un reciente reportaje de Reuters revela que el cultivo intensivo de aguacates en la región está asociado con la deforestación ilegal y prácticas ambientales insostenibles.

Las imágenes captadas por drones muestran excavadoras destruyendo áreas de bosque en el pueblo de Madero para construir depósitos de agua sin permisos, exacerbando la crisis ecológica que enfrenta la región.

De acuerdo con la organización Guardian Forestal, la legislación mexicana exige estudios de impacto ambiental y permisos específicos para la creación de depósitos de agua en cultivos agrícolas. Sin embargo, Conagua ha reportado que solo 42 de estos depósitos están debidamente registrados en Madero, lo que indica una violación generalizada de las normativas. Funcionarios locales y estatales confirman que muchos productores extraen agua de fuentes comunitarias, reduciendo su nivel a niveles alarmantes.

La controversia también involucra a importantes empresas estadounidenses. La Asociación de Consumidores Orgánicos ha criticado a West Pak Avocado Inc. y Fresh Del Monte Produce Inc. por etiquetar sus aguacates como “sostenibles” cuando, en realidad, provienen de prácticas destructivas. La organización afirma que los productos de estas compañías no cumplen con los estándares de sostenibilidad que promueven, afectando gravemente la reputación de estas marcas en el mercado.

Además de la deforestación, el cultivo de aguacates está afectando la migración de las mariposas monarca, que encuentran en Michoacán uno de sus principales hábitats. Activistas han observado cómo la tala de bosques impacta negativamente en el ecosistema, incluyendo la reducción de estas especies en peligro de extinción. 

Este panorama subraya la necesidad urgente de abordar los problemas de sostenibilidad en la cadena de suministro del aguacate. A medida que la demanda continúa creciendo, es imperativo que tanto productores como consumidores se comprometan con prácticas más responsables para proteger el medio ambiente y las comunidades locales afectadas. La adopción de medidas efectivas podría ser crucial para mitigar los impactos ambientales y sociales negativos de este comercio en expansión.