Probióticos: la alternativa ante el peligro del uso de antibióticos en la cría de animales

En la cría de animales la administración de dosis bajas de antibióticos de manera subterapéutica mantiene a raya a los microorganismos dañinos que amenazan su salud y desarrollo. Además, aumenta la producción de carne, leche y huevos, gracias a una mayor eficiencia alimentaria y crecimiento. Sin embargo, esto conlleva un problema: la creación de bacterias resistentes que pueden transferirse a los humanos, desencadenando una potencial amenaza para la salud pública.

Un equipo de investigación en la Facultad de Ciencias Exactas, de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) en Argentina, ha desarrollado una fórmula revolucionaria de probióticos destinada a animales, con el propósito de reducir la dependencia de los antibióticos como potenciadores del crecimiento. El compuesto, específicamente dirigido a cerdos y pollos, está formulado con Lactiplantibacillus plantarum CIDCA 83114, una cepa aislada de alimentos fermentados.

La Dra. Marina A. Golowczyc, integrante del equipo detrás del proyecto, señala la preocupación por los residuos de antibióticos en productos animales destinados al consumo humano. El aumento de bacterias resistentes, junto con la demanda de productos sin aditivos, impulsa la búsqueda de alternativas a los antibióticos tradicionales en el fomento del crecimiento.

En el marco de un cambio progresivo en la nutrición animal, los probióticos ganan terreno como aditivos alimentarios. Su papel en la reducción del uso de antibióticos para el crecimiento animal es cada vez más estudiado. No solo impactan positivamente en el rendimiento animal, sino que también presentan ventajas en términos de seguridad alimentaria. La ausencia de residuos en la carne y la prevención de la selección de patógenos resistentes son solo algunas de sus cualidades. No obstante, el camino hacia la implementación plena de probióticos en la producción animal está marcado por la constante investigación y mejoras en el proceso.

El esfuerzo de más de dos décadas del grupo de microbiología del CIDCA es palpable en esta iniciativa. Desde sus primeros pasos con bacterias lácticas aisladas del kéfir, hasta la formulación de probióticos pioneros, este equipo demuestra cómo la investigación continua puede conducir a soluciones transformadoras en la intersección entre la salud animal y pública.