Plan de exportación para el sector agrícola
A la hora de exportar los productores del campo tienen en mente un objetivo específico, pero desconocen los pasos necesarios para concretar sus operaciones.
Un plan de negocios de exportación es un documento que guía el esfuerzo de una empresa sobre cómo llegar al mercado internacional, y es elaborado antes de realizar las acciones.
En el marco de Agrofest 2022, Roberto Munarriz, asesor en asistencia empresarial de Programas y Proyectos Multisectoriales de Promperú, habló de la trascendencia de contar con este plan de exportación para consolidar el crecimiento de una organización.
Ya sea para ampliar su mercado, colocar un excedente en su oferta o el lanzamiento de un nuevo producto, a la hora de exportar los productores del campo tienen en mente un objetivo específico, pero desconocen los pasos necesarios en cuanto a certificaciones o requerimientos específicos para concretar sus operaciones.
En este sentido, el plan de negocios de exportación permite evaluar la efectividad, así como evaluar si la empresa cuenta con las herramientas para aprovechar las oportunidades del mercado internacional. De tal forma, determina el costo de la exportación hacia un mercado objetivo y demuestra la viabilidad económica y financiera de la idea de negocio.
Conocer a los competidores nacionales e internacionales que ya exportan a un mercado determinado, así como las barreras arancelarias para el producto agrícola que se requiere exportar, son elementos que hacen del plan de exportación un instrumento indispensable.
De acuerdo a la metodología de Promperú, la estructura de un plan de negocios de exportación debe tener:
Antecedentes de la empresa. Se refiere a detallar información general e histórica de la empresa, así como el objetivo de la internacionalización que debe ser congruente con un compromiso social.
Plan estratégico y organizacional. Es la evaluación interna y externa de la empresa, que permite evaluar las oportunidades y amenazas del sector. Algunas herramientas que se utilizan a menudo son: el diamante de las 5 fuerzas de Porter, el análisis PESTA y la evaluación interna o análisis FODA. En este punto, se desarrolla un plan estratégico que define la misión, visión, objetivos generales y específicos.
Estudio de mercado internacional. Identifica mercados potenciales externos, nichos de clientes y masa de consumidores. También realiza la descripción, la partida arancelaria correcta y las exigencias reglamentarias del producto, como etiquetado, normas y estándares de calidad, entre otros.
Plan de operación. Detalla cuál es el proceso de producción que debe plasmarse en un flujo de procesos, mismo que ayuda a identificar el costo de producción en cada etapa.
Gestión exportadora. Integra la distribución física internacional, analizando los gastos de comercialización en el mercado como: costos de transporte, seguros, agentes de aduanas y costos de documentación, entre otros.
Análisis financiero y plan financiero. Revisa cómo se ha desempeñado la empresa en un período de tiempo, haciendo un balance de pérdidas y ganancias. Todo ello con el principal objetivo de vender el proyecto a inversionistas.
“Como instrumento indispensable hacia la internacionalización, un plan de negocio de exportación permite a las Pymes tomar de manera exitosa las oportunidades que el mercado global ofrece a sus productos agrícolas”, concluyó Munarriz.