
México impulsa renovación de cafetales con nuevo programa
El programa “Cosechando Soberanía” busca impulsar la producción cafetalera mexicana con financiamiento, seguros y nuevas variedades resistentes a enfermedades.

La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México presentó el programa “Cosechando Soberanía”, una estrategia enfocada en fortalecer a las y los pequeños y medianos productores de café. El plan contempla acceso a financiamiento, subsidios para seguros agrícolas, cobertura de precios y tasas de interés preferenciales. Este respaldo permitirá renovar cafetales, aumentar el capital de trabajo y facilitar la comercialización del grano. El anuncio se realizó durante un encuentro dedicado a crear redes de colaboración en el sector, celebrado en el estado de Veracruz.
Actualmente, alrededor de 500 mil personas producen café en más de 700 mil hectáreas del territorio nacional. Sin embargo, el 59.4% de los municipios cafetaleros enfrenta condiciones de alta o muy alta marginación. El sector también se ve afectado por la baja rentabilidad, el impacto del cambio climático, la escasa innovación tecnológica y la inestabilidad de los precios internacionales. Frente a este panorama, el gobierno mexicano ha trazado metas ambiciosas, como duplicar la productividad por hectárea hacia 2030, aumentar el consumo interno y mejorar los ingresos de las familias productoras mediante mayor transparencia y fortalecimiento de las cadenas productivas.
Como parte de esta transformación, se pondrá en marcha un Plan Estratégico para la Renovación de Cafetales, que contempla el uso de semillas resistentes a enfermedades como la roya. La meta es renovar más de 22 mil hectáreas por año hasta 2030, con materiales genéticos mejorados que contribuyan a elevar la calidad y la resiliencia del cultivo. Además, se busca fomentar el desarrollo de cafés especiales y garantizar condiciones más justas en la cadena de valor.
La política pública “Café para el Bienestar”, en la que se inserta este programa, reconoce el papel clave que tienen los productores de pequeña y mediana escala para la soberanía alimentaria y el desarrollo rural. Según las autoridades, el enfoque es poner en el centro a quienes han sostenido por generaciones la cafeticultura mexicana, garantizando condiciones más equitativas para su permanencia y crecimiento en un mercado cada vez más competitivo.