Calor y sequía amenazan la producción mundial de alimentos
Entre 1980 y 2015 la sequía disminuyó en un 40% los rendimientos de trigo y maíz a nivel internacional.
En un escenario marcado por la creciente preocupación sobre la sostenibilidad alimentaria a nivel global, un estudio reciente, publicado en la revista Cabi Reviews señala la creciente relevancia del calor y la sequía como factores determinantes para la agricultura.
El equipo de científicos internacionales destaca la necesidad urgente de comprender las respuestas bioquímicas, ecológicas y fisiológicas de las plantas al estrés del calor y la sequía.
El análisis revela datos impactantes, donde se evidencia que entre 1980 y 2015, la sequía ha provocado una disminución de hasta un 40% en los rendimientos de trigo y maíz a nivel mundial. Advierten que los daños físicos, alteraciones biológicas y anomalías bioquímicas, vinculados a suministros de agua por debajo del nivel óptimo y temperaturas inusuales, impactan negativamente en el desarrollo y rendimiento de los cultivos. Cada grado centígrado adicional se traduce en una pérdida del 6% en la producción mundial de trigo, subrayando la urgencia de encontrar soluciones prácticas.
A pesar de los desafíos, el equipo de científicos resalta que, aunque el estrés por calor y sequía afecta al crecimiento y desarrollo de las plantas, el crecimiento reproductivo se ve particularmente perjudicado. Aunque existen avances para mitigar estas adversidades, ya sea mediante métodos genéticos o la inducción de tolerancia al estrés, es necesario intensificar los esfuerzos para preservar la producción alimentaria.