Científicos desarrollan proteínas similares a la carne a partir de algas
Más allá de la soja o las proteínas de guisantes, este avance a base de cianobacterias podría ser una alternativa más eficiente, sostenible y nutricional.
Científicos de la Universidad de Copenhague han logrado un avance significativo al desarrollar una nueva fuente de proteínas y fibras similares a la carne a partir de cianobacterias, también conocidas como algas verdiazules.
Estos hallazgos podrían revolucionar la industria alimentaria, ofreciendo alternativas vegetales con texturas y propiedades similares a los productos cárnicos, reduciendo al mínimo el procesamiento necesario.
Las cianobacterias se revelan como organismos ideales para albergar la nueva proteína, permitiendo la inserción de genes extraños y su organización en nanofibras, imitando la estructura fibrosa de la carne de manera sorprendente. Este descubrimiento no solo podría transformar la producción de alimentos, sino también abordar preocupaciones éticas relacionadas con el bienestar animal.
A nivel global, se está trabajando arduamente en la búsqueda de potenciadores de textura ricos en proteínas para alimentos de origen vegetal. Aunque los métodos convencionales, como la extracción de proteínas de guisantes o soja, requieren un procesamiento extenso, las cianobacterias podrían ofrecer una alternativa más eficiente y sostenible, reduciendo así la pérdida de valor nutricional y el consumo energético asociado.
Sin embargo, a pesar de su potencial, el refinamiento de estos organismos es crucial para aumentar la producción de fibras proteicas. El investigador Poul Erik Jensen compara este proceso con la domesticación de vacas lecheras, señalando la necesidad de "raptar" las cianobacterias para que trabajen en beneficio de la producción alimentaria.
Además de su utilidad como fuente de alimentos, las cianobacterias y otras microalgas están siendo estudiadas como posibles soluciones para la producción sostenible de materiales biodegradables. Desde envases hasta alternativas a los plásticos convencionales, estos microorganismos podrían desempeñar un papel crucial en la creación de un futuro más ecológico y sostenible para la industria.